ESTAMOS EN EL CORAZÓN DE LOS CUSQUEÑOS
Por: Fredy Romero Pacheco (BUBÚ)
Se nació un 6 de agosto del 1998 con el nombre de “El Diario del Cusco”, nacimiento que significaría un cambio total en la prensa escrita cusqueña; porque, llegaría los colores en las páginas por primera vez a un diario escrito; además, de tener el aval y la confianza de su director de contar con gente cusqueña como periodistas para la redacción diaria.
Hace menos de diez días, se imprimió la edición número 10,000 de “El Diario del Cusco”; edición que significa la consecuencia, la perseverancia, el profesionalismo, el desprendimiento y el amor que se tiene al Cusco.
Hoy, El Diario del Cusco cumple 24 años de nacimiento periodístico, 24 años de brindar ininterrumpidamente sus páginas dedicadas a una ciudad milenaria; trabajo que, ni en los 2 años de la Pandemia del CORONAVIRUS paró, gracias a la tenacidad, terquedad y de amor al trabajo de su director Washington Alosilla Portillo.
Fue – en ese entonces un grupo de jóvenes – quienes tuvieron el atrevimiento y la responsabilidad de plasmar en su redacción las noticias diarias y cotidianas de los sucesos en Cusco y el Perú; noticias generales, políticas, económicas, deportivas, de opinión y otros.
Se pagó el llamado “Derecho de piso”. Como cualquier ser humano se cometieron errores; pero, de esos errores se aprendió y se sacaron conclusiones para día a día, mes a mes y año a año mejorar y tener el reto de llegar a ser no los mejores; sino, quienes generen la confianza y ser voceros de la verdad.
Pasaron muchas cosas, hechos y anécdotas durante estos 24 años. Desde la infraestructura o planta periodística que era solamente una pieza donde todo funcionaba, hasta lo que es hoy todo un edificio donde se tienen oficinas administrativas, planta de impresión, oficinas de redacción y también la zona amplia para el canal de televisión.
Quienes trabajaron y dieron inicio a este proyecto periodístico revolucionario, no pueden pasar por desapercibido. El primer director periodístico Claudio Zúñiga Carrasco y el gran y querido José Fernández Núñez, hombres que se nos adelantaron en el camino; pero, dejaron ejemplos y enseñanzas para los que siguen en este quehacer periodístico escrito.
La credibilidad, la investigación, el buen estilo y la veracidad comprobada desde siempre, hace que El Diario del Cusco sea el referente informativo para las cadenas mundiales de noticias y que las consultas, entrevistas y datos sean directamente con la plana periodística encabezada por Marco Antonio Casas Santillana.
Cada letra, cada párrafo, cada titular y cada noticia, nace a diario para escribir la historia del Cusco. Eso es una responsabilidad y compromiso de cada uno de los periodistas en sus respectivos espacios; notas generales, políticas, culturales, editorial, columnas, opinión y deportes.
Modestia aparte, el “SÍ SE PUEDE”, nació en las páginas de El Diario del Cusco una noche del 11 de diciembre del 2003; día antes que Cienciano juegue en Argentina en el Monumental ante River Plate por la primera final de la Copa Sudamericana.
Ante las circunstancias y la grandeza en ese momento de nuestro Cienciano, había esa esperanza enorme de verlo campeón y que un sueño de todo el pueblo cusqueño se haga realidad. Ante tanto deliberar y meditar, se llegó a la conclusión de que sí se podía y en titular se plasmó el “Sí se puede”, que ahora es utilizado en mundiales y olimpiadas.
Toda promesa tiene que ser cumplida con honor. Lo menos que podemos ofrecer es ser más humanos, ser más empáticos, ser más verdaderos, ser más objetivos y ser mejores personas; que, enseñen los valores, la ética, la moral y la verdad.
Sin los lectores de las páginas físicas y virtuales, “El Diario del Cusco” no sería absolutamente nada. Por ello, gracias a los miles de seguidores y a quienes confían en este diario para poder realizar sus publicaciones. Estamos seguros que podemos errar en un momento; pero jamás perderemos la confianza de todos ustedes.
No se trata de un simple Diario que mecánicamente o rutinariamente labora; no, se trata de un gran material humano con el que se cuenta desde la gerencia general con Washington Alosilla Portillo, hasta el último hermano canillita que vocea y vende a diario los periódicos.