Anoche a las 21 horas con 9 minutos un fuerte remezón se registró en la Ciudad Imperial generando preocupación en la población, el sismo provoco alarma en habitantes especialmente de la zona norte de la urbe especialmente en los tradicionales barrios de Santa Ana, San Cristóbal y San Blas.
Posteriormente el Instituto Geofisico del Perú precisó que el sismo tuvo una magnitud de 4.8. El sismo de anoche tuvo epicentro en el distrito de Curahuasi y con una profundidad de 18 kilómetros.
De inmediato el Centro de Operaciones de Emergencia (COER) del Cusco inició coordinaciones para monitorear en todas las provincias y distritos en donde se sintió el sismo como Anta, Urubamba, Cusco, Paruro, La Convención. Especialmente hubo comunicaciones con Limatambo y Mollepata.
Mientras tanto la red de periodistas de El Diario del Cusco se activó, los reportes hasta el cierre de la presente edición fueron tranquilizadores, si bien es cierto en los distritos de Mollepata y Limatambo el sismo se sintió muy fuerte, no hubo reportes de daños fuertes, sin embargo hoy desde muy temprano según se precisó en los comités distritales de ambas comunas habrá un monitoreo presencial en comunidades alejadas así como en el sistema de carreteras rurales.
TEMPLO EN ANDAHUAYLILLAS
De otro lado ayer se precisó que el templo colonial San Pedro Apóstol de Andahuaylillas, provincia de Quispicanchi, conocida como la “Sixtina de América” permanecerá cerrada temporalmente, como medida de prevención, tras los sismos que dañaron algunas estructuras.
La madrugada del pasado martes a las 05:09 horas, la estructura del templo construido a fines del siglo XVI e inicios del XVII, fue afectada por el sismo de magnitud 4.4, junto a casonas donde funcionan las áreas administrativas, y otras de civiles ubicadas en su entorno.
Meritxell Oms Arias, directora de la Ruta del Barroco Andino, que los daños estructurales no son grandes, sin embargo, merecerá la evaluación de ingenieros estructuralistas del Ministerio de Cultura (Mincul), el Arzobispado de Cusco para las labores que sean necesarias.
Tras una breve supervisión, se apreciaron en la parte externa la caída de gran cantidad de tejas por la misma pendiente pronunciada del gran inmueble, sin embargo, la afectación más visible es en el campanario “vamos a apuntalarlo, porque si se ha caído algún adobe de los arcos, pero no la torre en sí, esto es urgente lo vamos a empezar ya”, dijo.
En ese sentido se precisó que mañana se efectuara una inspección exhaustiva de los ambientes “hay algunas grietas, pero no son grandes, no son profundas, no se han roto imágenes, no se ha roto nada, solo se han caído algunos trozos de yeso, algún trozo de pintura mural, pequeñito en el recinto”, dijo la directora.
Recordemos que la Sixtina de América fue restaurado de manera integral del 2008 al 2014. “Es un recinto con el que hay que tener mucho cuidado porque es parte del Patrimonio Cultural de la Nación y del Cusco, hay que verificar todo, necesitamos un estudio bien hecho. Hasta que no haya la visita y no tengamos los estudios realizados, no vamos a poder abrir el recinto por seguridad de las personas, de los trabajadores y visitantes”, concluyó. Meritxell Oms Arias.