MACHUPICCHU, MUESTRA DE FUERZA Y UNIDAD
El viernes pasado, se cerró un capítulo que parecía poner en riesgo la actividad turística nacional por la amenaza de cierre de Machupicchu. El diálogo se abrió paso y una gran lección para todos quedó inscrita en esta historia, que trae por los suelos las autorizaciones que la Municipalidad Provincial de Urubamba había empezado a repartir para operar en la ruta Hiram Bingham. Cuando todo apuntaba a que en Machupicchu un gran conflicto sobrevendría, la firma de un acuerdo entre Consettur Machupicchu y la empresa Súmac Ayllu San Antonio de Torontoy, puso final feliz al posible conflicto y confirmó lo que el Diario del Cusco había venido afirmando durante semanas: las autorizaciones de la Municipalidad de Urubamba eran ilegales. Tal afirmación se desprende del acuerdo antes citado, pues la empresa comunal, ya forma parte de Consettur Machupicchu y con ello, turistas y operadores respiran con alivio, a la vez que Machupicchu como pueblo, da una muestra de fuerza y unidad como mensaje a quienes amparados por el alcalde urubambino, pretendían ingresar a operar en la ruta.
A pesar de contar con una autorización otorgada por la Municipalidad Provincial de Urubamba, la empresa Súmac Ayllu San Antonio de Torontoy, optó por suscribir un acuerdo con Consettur Machupicchu, ratificando lo que durante semanas habíamos venido informando con el sustento acucioso que caracteriza al Diario del Cusco, respecto del contrato de concesión de la citada empresa y sus alcances respecto de la ruta Hiram Bingham. El tiempo nos da la razón una vez más y ratifica la veracidad y acierto de nuestra información.
Hoy que la empresa comunal de San Antonio de Torontoy forma parte de Consettur, la base social de la concesionaria de la ruta Hiram Bingham se consolida y diversifica el beneficio de la explotación de la ruta entre una buena parte de los pobladores de Machupicchu, que con satisfacción entienden los beneficios del acuerdo, pues son conscientes de la importancia de la paz social para el desarrollo del turismo.
Con la suscripción del acuerdo, Consettur Machupicchu y San Antonio de Torontoy enviaron un claro mensaje de unidad del pueblo de Machupicchu al municipio urubambino, pues no sólo se desconocieron las autorizaciones que dicha municipalidad viene otorgando, sino que se fortalecieron los lazos que muestran a la población como una fuerza que tendrá que superar cualquier intención de acceder a la ruta.
El rol desempeñado por el Alcalde de la Municipalidad Distrital de Machupicchu, Darwin Baca León, fue crucial para lograr el acuerdo, pues con su intervención se puso en clara en relevancia el compromiso social que las empresas turísticas deben tener con la población y la importancia del diálogo y el respeto de la legalidad como elementos que impulsan una sociedad abierta, inclusiva y organizada, capaz de solucionar sus propios problemas.
Así, en esta historia, las autorizaciones de la Municipalidad de Urubamba y quienes aportaron por ellas, van quedando sin piso, a la vez que Machupicchu, respira aliviado y latente como nuestra Maravilla, nuestro más valioso Santuario.