Un hombre murió y más de un centenar de personas permanecen detenidas el martes en Cuba, mientras el internet móvil sigue cortado dos días después de las protestas contra el gobierno, que niega un «estallido social» en medio de las críticas de Washington. El hombre, de 36 años, falleció cuando participaba el lunes en una protesta en el humilde barrio La Güinera, en la periferia de La Habana, donde hubo enfrentamientos entre manifestantes y policías.
Las inéditas manifestaciones, que degeneraron en enfrentamientos con las fuerzas del orden, son alimentadas por la crisis económica que sacude al país, pero el gobierno niega un «estallido social».
«El 11 de julio no hubo en Cuba un estallido social, no lo hubo por la voluntad de nuestro pueblo y el apoyo de nuestro pueblo a la revolución», afirmó el canciller Bruno Rodríguez en una conferencia de prensa.
Mientras tanto de acuerdo con una lista publicada en Twitter por el contestatario Movimiento San Isidro, al mediodía del martes 130 personas permanecían detenidas o desaparecidas, entre ellas José Daniel Ferrer y Manuel Cuesta Morúa, dos de los principales disidentes del país, y el artista contestatario Luis Manuel Otero Alcántara. Las cifras oficiales sobre las detenciones no se han hecho públicas.
«Llamamos a la calma y condenamos toda violencia contra quienes protestan pacíficamente. Y también hacemos un llamado al gobierno cubano para que libere a cualquier detenido por protestar pacíficamente», dijo este martes en rueda de prensa en Washington el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
Y subrayó que «cerrar el acceso a la tecnología, cerrar los canales de información, eso no hace nada para responder a las necesidades y legítimas aspiraciones del pueblo cubano».
La líder de la organización opositora Damas de Blanco, Berta Soler, fue arrestada con su esposo cuando intentaban salir de su casa en La Habana, informó la agrupación en un tuit.
Entre los detenidos se encuentra también Camila Acosta, una periodista cubana de 28 años, según Alexis Rodríguez, jefe de la sección internacional del periódico madrileño ABC, con el que había trabajado durante seis meses.
El ministro de Relaciones Exteriores español pidió el martes a las autoridades cubanas que respeten el derecho de manifestación y exigió la liberación «inmediata» de Acosta.
Una youtuber, Dina Stars, fue arrestada en su casa por la policía cubana cuando hablaba en vivo con un programa de la televisión española, según esta última.
En la capital el martes reinaba una aparente calma, aunque con gran presencia militar y agentes vestidos de civil, mientras el internet móvil, motor de las manifestaciones del domingo, seguía suspendido en la isla.