Porque gran parte de la población ya tuvo el virus
Luis Novoa Millones, médico internista del Hospital Loayza, consideró que es posible que la prevalencia del nuevo coronavirus en el Perú sea más alta de lo que se conoce y que ello explicaría que no se haya desatado el avance de una tercera ola de la pandemia de la COVID-19 en el país, que se preveía para septiembre.
«Una pregunta que todos se han planteado (la llegada de la tercera ola de la COVID-19) y nosotros como médicos también la hemos planteado desde hace varias semanas […] sin embargo, parece que la seroprevalencia en el país es mucho más alta de la que teníamos conocimiento», dijo.
Indicó que en el pico de la segunda ola las hospitalizaciones por COVID-19 llegaban a las 15 mil camas, y que actualmente solo bordean las 3 mil. Además, resaltó que por primera vez en más de un año y por varias semanas todas las regiones del país aparecen como zonas de bajo riesgo de contagio.
El especialista recordó que, en diciembre del año pasado, un estudio del Instituto Nacional de Salud (INS) reportó que 40% de la población peruana se había infectado con el coronavirus en la primera ola y desde entonces no se ha desarrollado otro estudio de prevalencia.
Indicó que en la segunda ola mucha gente de entre 20 y 60 años, económicamente activa, salía de sus viviendas a trabajar, regresaba con el virus y contagiaban a sus familias, lo que provocó miles de muertes. Señaló que «es probable que esto haya ocasionado que el porcentaje de personas con anticuerpos contra el coronavirus haya llegado a ser lo suficiente como para alcanzar la inmunidad de rebaño».
«No tenemos un nuevo estudio de seroprevalencia en el país, que nos diga con certeza si estos es así o no, pero es una probabilidad», dijo.
Novoa Millones sostuvo que otra posible causa del descenso de casos de COVID-19 en el país se deba a que la variante lambda, predominante en la segunda ola, «nos pueda estar ofreciendo inmunidad cruzada fuerte contra la variante delta».
Además, dijo que la variabilidad genética entre la población peruana y el avance de la vacunación, que se acerca al 50% con doble dosis, podrían ser factores que expliquen que se haya frenado la llegada de la tercera ola.
El médico internista dijo que es posible que el Perú este en un punto en que la infección por el virus se haya convertido en una endemia; no obstante, dijo que es preferible no bajar la guardia » de lo que pueda significar una tercera ola en los próximos meses».